Terminamos el verano, se produce la vuelta a la rutina, el fin de las vacaciones, el regreso a la normalidad…así comienzan los septiembres.

¿Volvemos a la normalidad? ¿No sería mejor afirmar, que finalizamos el periodo de descanso y simplemente continuamos?

Tan importante es el hecho de saber desconectar, descansar y relajarnos como incorporarnos a nuestro puesto de trabajo, a los horarios escolares y a las responsabilidades hogareñas.

La idea de relax, disfrute y diversión asociada a las vacaciones supone a veces el riesgo de idealizar esos días con los de mayor disfrute, convirtiendo el regreso en un periodo en el que aflora el mal humor y el malestar.

Volver a casa, retomar las responsabilidades con la mente más despejada, con el buen sabor que dejan los días anteriores, con el cuerpo descansado, aprovechando todo lo positivo de nuestras vacaciones y continuar donde lo dejamos, sería una forma más productiva de afrontar el temido regreso.

Durante unos días de viaje, de playa, de montaña, tanto si nos vamos como si nos quedamos en casa, seguimos realizando tareas distintas, pero en definitiva seguimos activos y con responsabilidades, porque la vida en sí las lleva implícitas.

Desconectar y descansar, no significa desactivarse del mundo, significa dejar de pensar en el trabajo, en el colegio, en los estudios, en los conflictos, en las facturas, en la boda, en la operación, etc…e intentar centrarnos, en la sensación de la arena en los pies, en el frescor del mar, en lo bien que huele el monte, en lo inmenso que es el Coliseo de Roma, en lo bueno que está el plato que acabamos de probar, en lo que te duele la cara de reírte, en lo interesante que es el libro que empezaste hace dos días, en lo que disfrutas con tus hijos, en lo magnifica que está tu pareja, en lo que echabas de menos a tu familia, en lo rápido que corre tu perro campo a través, en todo lo que has visto en un día, en lo cómoda que es la tumbona de la terraza, en lo bien que te sientes.

Toda una lista sencilla de cosas muy simples, que pasan en verano, que para nuestra suerte, pasan cualquier día, mientras continuamos con nuestra rutina, solo hay que darles un poquito de espacio.

Las vacaciones están para disfrutarlas, es correcto si, pero el resto del año, también!!

¡¡Feliz Regreso!!

 

María Martínez Antón

CV 10509