Cuando sales con alguien ¿te sientes inquieto, inseguro, obsesionado (y muy de vez en cuando eufórico)?
Las relaciones de pareja consumen gran parte de tu energía emocional y te disgustas con facilidad. Esto que sientes, no es amor, es tu sistema de apego ansioso activado.
Muchas veces confundimos el amor con la activación del sistema de apego.
O quizás cuando sales con alguien sigue importándote mucho conservar tu independencia, te cuesta mucho abrirte y pones cierta distancia emocional y te muestras a la defensiva al menor signo de control por parte del otro. Entonces tu sistema de apego es evasivo.
O en cambio te resulta fácil ser cercano y cariñoso con tu pareja, disfrutas con la intimidad sin preocuparte en exceso por la relación. Sueles tomarte con calma las relaciones sentimentales y comunicas sin miedo tus necesidades y sentimientos a tu pareja. Tu sistema de apego es seguro.
Hay tres estilos de apego o maneras que tenemos las personas de percibir la intimidad y de responder a ella en una relación de pareja. Se equipara a los estilos que se dan entre los niños y sus padres: estilo seguro, ansioso y evasivo.
Los tres estilos de apego difieren en:
- Las ideas que tenemos sobre la intimidad y la relación.
- La forma de reaccionar ante un conflicto.
- La actitud ante las relaciones sociales.
- La capacidad para expresar deseos, necesidades y expectativas que tienen en la pareja y relación.
Todas las personas que viven en esta sociedad, tanto si empiezan una relación como si llevan mucho tiempo casados, encajan en los tres estilos de apego. El 50% son de estilo seguro, 25% ansiosos y 25% evasivos.
La relación de pareja entre una persona con estilo ansioso y otra con estilo evasivo suele vivirse con muchas dificultades y problemas.
¿Y tú que estilo de apego tienes? ¿Y tú pareja?
Basado en el libro Maneras de amar. Dr. Amir Levine y Rachel Heller.
Mª Eugenia Coret
Psicóloga Colegiada Num.CV05296